Redoblando su histórica actitud, la UCR seguirá respondiendo con más institucionalidad y democracia ante la creciente violencia.
La Argentina vive momentos dramáticos donde a la falta de voluntad de diálogo de un gobierno cada día más encerrado, se le suma la furia de quienes no admiten las diferencias de pensamientos y acción.
La corrupción, la impunidad y la creciente desigualdad completan un triste cuadro de situación. Persiste el Radicalismo la búsqueda de responsabilidad, honestidad y franqueza sobre todo ante la andanada de injustificables comportamientos de grupos vinculados con el kirchnerismo.
Los millonarios recursos destinados a las organizaciones sociales adictas al kirchnerismo, que tienen a las familias pobres de rehenes, buscan organizar Estados paralelos, a nivel municipal o provincial. En muchos casos, loables cooperativas, fundaciones o asociaciones de asistencia y promoción social han devenido en grupos violentos que generan un clima de miedo, crispación e intranquilidad en la población.
Frente a la cobarde y artera agresión sufrida por el su presidente, senador Gerardo Morales, la Mesa Nacional la considera una acción directa contra la Unión Cívica Radical, como partido político y organización de ideas y actitudes, y también contra sus integrantes. Y ha resuelto que se arbitren la totalidad de los medios y mecanismos legales que impidan que quede impune.
La UCR repudia el accionar violento e intolerante de estas organizaciones y reconoce el trabajo comunitario de tantos militantes que enaltecen las ideas de justicia y democracia social. Al mismo tiempo que agradece la solidaridad expresada por particulares e instituciones de la democracia ante los sucesos del pasado viernes 16 en San Salvador de Jujuy al titular del partido, Gerardo Morales, junto al diputado Miguel Giubergia y los auditores generales de la Nación, Leandro Despouy y Alejandro Nieva en la sede del Consejo Profesional de Ciencias Económicas.
En un nuevo aniversario de la recuperación de la democracia en nuestro país y, como homenaje a quien fuera uno de sus indudables líderes, Raúl Alfonsín, la UCR convoca a la ciudadanía a celebrar un nuevo 30 de Octubre en las puertas del centenario partido.
Porque mucho le ha costado al país recuperarla hace 26 años, ahora debe cuidarse la democracia argentina. Radicales y ciudadanos de otros partidos o sin filiación política, el último viernes de Octubre insistirán en la reivindicación de los pilares fundamentales de la democracia: la tolerancia, la igualdad, la solidaridad y la paz.
La UCR en el marco del Acuerdo Cívico y Social, ha analizado una agenda de trabajo sobre temas centrales de la política argentina. La lucha contra la pobreza y el ingreso universal para la niñez; una reforma del INDEC; implementar en forma urgente la movilidad del 82% de las jubilaciones; la cuestión federal y la creación de comisiones investigadoras (sobre el saqueo de los recursos naturales y sobre la situación del transporte público); la situación del Consejo de la Magistratura con mayoría kirchnerista; la ley de educación superior; política activas y expansivas de la actividad productiva y comercial junto al tema retenciones, entre otros temas comenzarán a tratarse el próximo martes de la sede del Comité Nacional de la UCR.
La Mesa Nacional, además, conformó un grupo de trabajo con técnicos de la fuerza política para analizar la propuesta del gobierno junto a las iniciativas con estado parlamentario sobre reforma política.
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